Sorprendido de que no es normal pensar en el futuro
extiendo mis brazos ante ti como geranios
para que pases sin notarme sin medirme
mientras me llevas hacia un delante inexistente
Si quieres viviremos en la cuarta dimensión
donde el tiempo es un punto ya ocurrido
donde pensar es sólo otra textura y
ambos carecemos para siempre
No digo siempre como eterno
sino como una rejilla de musgo con la que cubrir la falta.
Puedes llevarme hasta allá si así lo quieres
o aunque no quieras puedes atraerme con tu poder esférico
de cuerpos celestes en la órbita perfecta
Si lo que propones es un drástico presente
y lo que dispongo es una dialéctica ancestral
te entrego todo el futuro absorbible por tu eclipse
y así yo pueda comenzar a sentir
poco a poco a poco el vacío
como equilibrio
Olvido y memoria conversan
para omitir el fin