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Agua en Marte

martes, 29 de septiembre de 2015
Paso los días solo en un subterráneo
lo único que entra son las hojas
hojas de árboles y papeles
del 6695 del 617
domicilios viejos...
...¿hace regalos el bosque?

Oigo voces en el piso de arriba
son las siluetas de los habitantes
sus pasos proyectan sombras bajo la puerta
sombras que yo dibujo
sobre una tela blanca:
los cordones de sus zapatos
los dibujo como pájaros que vuelan a ras de suelo
las bastas de sus pantalones
las dibujo como cataratas
el ruido de sus pies
lo dibujo como el murmullo de los sauces.

Los escuché decir
que tras años de mirar la misma foto
científicos encontraron agua en Marte
¡y yo que pensaba
que eso siempre lo habíamos sabido!

Me llegó una carta
alguien la dejó bajo la puerta
dice: esto también es una hoja
el bosque no regala
nada.

Tres cosas que siempre hemos sabido:
el 6695 el 617
que los árboles deshojan hojas y no corteza
y que Marte tiene agua subterránea
desde el Origen de los tiempos.

Escuché también que no es verdad lo de Marte.
Que el agua es salada y está en la superficie
si es así, cuando llegue la hora de partir,
no podré ocultarme.

Oigo los pasos de los habitantes
correr de pieza en pieza
alguien ha sugerido la huida
las voces dicen algo sobre el agua de la Tierra
que ha desaparecido
que nos hemos condenado
que las cortezas de los árboles están secas
que toda la atmósfera se ha llenado de hojas
que llegó el día en que los pájaros
vuelan hasta caer muertos
que se han callado todas las vertientes.

Las voces proyectan su sombra bajo mi puerta
en mi trozo de tela dibujo
un subterráneo
y sobre él un bosque hecho de sauces
en cuyas hojas se lee:
esto también es una carta.

Con todos estos acontecimientos
floreciendo sobre mí
he decidido
que no viajaré a Marte
aquí estoy bien
rodeado de papeles
el 6695 el 617
esperaré en silencio el fin de los pájaros
siempre supe dónde estaba el agua
y siempre supe dónde
sólo tierra.

The more loving one - W. H. Auden

domingo, 27 de septiembre de 2015


Looking up at the stars, I know quite well
That, for all they care, I can go to hell,
But on earth indifference is the least
We have to dread from man or beast.

How should we like it were stars to burn
With a passion for us we could not return?
If equal affection cannot be,
Let the more loving one be me.

Admirer as I think I am
Of stars that do not give a damn,
I cannot, now I see them, say
I missed one terribly all day.

Were all stars to disappear or die,
I should learn to look at an empty sky
And feel its total darkness sublime,
Though this might take me a little time.

Ilusiones sobre la muerte

miércoles, 23 de septiembre de 2015
Hago un ejercicio:
los imagino a todos como cadáveres recientes
tibios, blandos y ansiosos
insensibles a casi toda fuerza de la carne
sensibles solamente a la gravedad.

Conozco por puro azar
cómo se pone un cuerpo
cuando recién brota el morir
la nuca se afirma al colchón
la boca se abre como una manzana
los brazos cuelgan en ángulos imposibles
el rostro se desdibuja
las arrugas, las cejas y los labios se vuelven pedestres
como el relieve irrelevante
de cualquier piedra del jardín.

Ahora, imagínalos
a ellos los que quieres
a los que hacen inflexiones coloridas con la voz
los que impregnan los paisajes con sus ruidos
los que alzan las manos al hablar
ellos cuyos cuerpos son más grandes
que su cuerpo
imagínalos vibrantes a tu lado
y algún día
nada
la completa falta de carisma
el sometimiento absoluto a la atmósfera
la carencia total
el rostro incoercible.

Eso hago
y lo hago ahora frecuentemente
mi madre mis amigos mis compañeros de trabajo
puedo predecir sus rostros
cuando yagan como una mezcla
de carne y piedras
que alguien arrojó sobre la cama.

A veces me pregunto si mi cabeza
logrará mantener estos dos mundos separados
si no empezaré de pronto
a ver rostros de muertos
en los que aún viven
si dejaré de sentir sus vibraciones
si dejaré de entender el tono de su voz
si dejaré de seguir sus pupilas
si sentiré que todos son un paño blanco
una escultura de piedra caliza
o sólo piedra
sin escultura.

Me pregunto, a su vez,
si alguna vez veré rostros de vivo
en los muertos
si les sonreiré de reojo por una ironía
si sus cuerpos serán más grandes que sus cuerpos
si levantarlos será más fácil
que cargar a los vivos.

Es que hay muertos tan gráciles
tan llenos de energía
y hay vivos tan ausentes
tan impermeables a mis gestos
que es difícil distinguir
cuánto de lo que veo es artificio
y cuánto es un hombre
que me mira desde lejos
y se promete
que yo no estoy realmente aquí.

Imagíname así
es fácil imaginar a un muerto
cuando ya has visto uno.

Eso hago.
Ayuda a poner las cosas
en perspectiva.

Los caminos

lunes, 14 de septiembre de 2015
y en ese sueño
tan deseado
mi corazón aún entumecido
ya no sabrá qué es
aquello que tanto extraña. 

Si je dois l’oublier un jour, 
La vie effaçant toute chose, 
Je veux dans mon coeur qu’un souvenir 
 Repose plus fort que l’autre amour. 

Le souvenir du chemin, 
Où tremblante et toute éperdue,
Un jour j’ai senti sur moi brûler tes mains.

Chemins de mon amour,
Je vous cherche toujours.
Chemins perdus,
Vous n’êtes plus
Et vos échos sont sourds.
Chemins du désespoir,
Chemins du souvenir
Chemins du premier jour,
Divins chemins d’amour.


Este invierno no es un error

lunes, 7 de septiembre de 2015
Quisimos creer
que el invierno se había ido por completo
el sol, condenado sol, nos pareció suficiente
para pensar que al fin
habíamos dejado atrás el frío

nos obsesionamos
con las primeras flores de los árboles
las mañanas luminosas
eran todo lo que recordábamos
dejamos de abrazarnos unos a otros
porque ya no necesitábamos el calor
y quisimos creer que al fin
podríamos salir desnudos
sin temer a las agujas
de las estalactitas.

Fue tal vez esa primera nube oscura
taconeando desde lejos
o los huesos que dolieron
al transmitir el mensaje del sur aún vivo
o fue tal vez el silencio de los pájaros
que extrañados como nosotros
abrieron sus plumas
para cubrir los nidos.

Pero qué importan las señales de la ausencia
y qué importa que podamos predecir
las estaciones

lo cierto es que el invierno no se fue
a ninguna parte
y hoy nos dejó perplejos bajo el diluvio

la carne sigue tibia
bajo la piel
pero la sombra que a todos nos persigue
siempre enfría
nuestros pasos.

La naturaleza, más sabia
que las pasiones,
apaga nuestra esperanza
sin dudarlo
ni por un instante.

La esperanza

sábado, 5 de septiembre de 2015
"Quiero huir, quiero no ver, quiero quedarme serena, vacía. ¿Por qué, entonces, la esperanza me persigue, me ronda y me muerde...? "

Todo gira

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